El Consejo Europeo ha adoptado hoy una Directiva para capacitar a los consumidores de cara a la transición ecológica. La nueva normativa reforzará los derechos de los consumidores modificando la Directiva sobre prácticas comerciales desleales y la Directiva sobre derechos de los consumidores y adaptándolas a la transición ecológica y la economía circular. Esta es la última etapa del procedimiento de toma de decisiones.
“Gracias a la directiva adoptada hoy, los consumidores estarán mejor informados, mejor protegidos y mejor equipados para ser verdaderos actores de la transición verde”
Pierre-Yves Dermagne, Viceprimer Ministro belga y Ministro de Economía y Empleo.
Protección contra las prácticas desleales
La Directiva protegerá a los consumidores contra las afirmaciones “verdes” engañosas, incluidas las relativas a la compensación de las emisiones de carbono. También aclarará la responsabilidad de los comerciantes en casos de información (o falta de información) sobre obsolescencia prematura, actualizaciones innecesarias de software u obligación injustificada de comprar piezas de recambio al productor original. La Directiva también mejorará la información de que disponen los consumidores para ayudarles a tomar decisiones circulares y ecológicas. Por ejemplo, los productos de toda la UE llevarán una etiqueta armonizada con información sobre la garantía comercial de durabilidad.
Próximos pasos
Tras la aprobación hoy por el Consejo de la posición del Parlamento Europeo, se ha adoptado el acto legislativo. Tras ser firmada por el Presidente del Parlamento Europeo y el Presidente del Consejo, la Directiva se publicará en el Diario Oficial de la Unión Europea y entrará en vigor a los veinte días de su publicación.
Antecedentes
La propuesta se presentó el 30 de marzo de 2022 bajo la responsabilidad del comisario Didier Reynders. Es una de las iniciativas establecidas en la Nueva Agenda del Consumidor 2020 y en el Plan de Acción de Economía Circular 2020 de la Comisión, y viene a continuación del Acuerdo Verde Europeo. Forma parte de un paquete de cuatro propuestas, junto con el Reglamento sobre diseño ecológico y las propuestas de Directiva sobre reclamaciones ecológicas y fomento de la reparación (derecho a reparación).