Otro alto representante de Europa, esta vez el canciller alemán Olaf Scholz, visitó Moscú de forma relámpago. Scholz y el Presidente Putin mantuvieron una larga y profunda conversación. El centro de atención de Scholz, por razones obvias, fue la situación en torno a Ucrania. El líder ruso se centró en el desarrollo de una cooperación económica dinámica entre Rusia y Alemania, así como en el tema de las garantías de seguridad de la OTAN y de Estados Unidos, que es relevante para Moscú. ¿Cuál es el resultado de esta reunión?
El propio Scholz dijo al final de las negociaciones: “Ya he informado de que fue una conversación muy intensa, también muy confidencial”. “Nos comunicamos en un ambiente amistoso, pero hubo una intensa discusión sobre temas en los que tenemos posiciones diferentes”.
“Hablamos durante mucho tiempo con el presidente Putin, no se nos escapó ni un solo tema, ni complicado ni sencillo. Temas culturales, temas económicos. Por supuesto, muchos temas giran en torno a la seguridad europea y a Ucrania. El hecho de que hayamos hablado durante tanto tiempo es una buena señal”, dijo la Canciller alemana.
La duración de la conversación con el Presidente ruso Vladimir Putin (unas tres horas) fue una buena señal, declaró el Canciller alemán Olaf Scholz a la prensa alemana en Moscú tras la reunión en el Kremlin.
Scholz describió el ambiente de la reunión con Putin como amistoso y la conversación como confidencial.
“Hubo una conversación muy intensa y también muy confidencial”, dijo Olaf Scholz en una entrevista con el canal de televisión Die Welt.
Durante las conversaciones, los líderes de los dos países discutieron la situación en torno a Ucrania. Putin reiteró la conocida posición de Moscú de que Rusia no tiene intenciones agresivas hacia Ucrania. No habrá ningún ataque, es una señal clara de Moscú.
Moscú cree que Occidente ha lanzado a propósito una campaña de propaganda y ha inflado la histeria en torno a la supuesta agresión contra Ucrania. En una reciente conversación con el presidente estadounidense Biden, Putin volvió a insistir en el deseo de Moscú de encontrar vías diplomáticas para resolver la situación de crisis.
En una rueda de prensa conjunta, Putin calificó de “genocidio” lo que está ocurriendo en Donbass. A su vez, el canciller Scholz calificó estas palabras de “equivocadas”. No obstante, ambos líderes coincidieron en que seguir trabajando en el formato de Normandía, así como en la aplicación de los Acuerdos de Minsk, es la única manera de estabilizar la situación en Ucrania.
La reunión en Moscú, según muchos analistas, fue mucho más allá de los contactos con los países occidentales que se han hecho familiares últimamente en el espíritu de “no tocar a Ucrania”.
El Presidente Putin dijo durante las conversaciones que le resultaba muy interesante y útil escuchar la opinión de Scholz sobre lo que ocurre en el mundo.
El canciller alemán afirmó la necesidad de resolver los problemas en las relaciones bilaterales entre Rusia y Alemania sobre la base del diálogo. En particular, con respecto a las restricciones mutuas introducidas recientemente en el trabajo de los medios de comunicación: Russia Today en alemán y la oficina de representación de DW en Moscú.
Putin calificó a Alemania como uno de los socios prioritarios de Rusia.
Scholz señaló que la situación de la seguridad en el mundo y en Europa es complicada, por lo que es necesaria la comunicación y un mayor diálogo.
Según Moscú, la energía sigue siendo uno de los ámbitos de cooperación más importantes entre ambos países. “Rusia ha sido un proveedor fiable de recursos energéticos durante mucho tiempo”, subrayó Putin.
En Occidente, según muchos analistas europeos, la cautela de Alemania en la crisis ucraniana causa irritación, especialmente en Estados Unidos. Allí, muchos políticos empiezan a dudar poco a poco de que los alemanes formen parte del equipo occidental, que pretende demostrar a Rusia quién decide aquí, así, en concreto, escribe la edición danesa DR.
Scholz dijo que haría hincapié en la disposición de Occidente a dialogar sobre los problemas de seguridad de Rusia, pero confirmó su disposición a imponer sanciones en caso de invasión de Ucrania.
Anteriormente, en enero, el canciller Scholz dijo que Alemania estaba dispuesta a discutir la detención del gasoducto Nord Stream-2 en caso de un ataque ruso a Ucrania.
Moscú subraya que los militares rusos volverán a sus puntos de despliegue permanente tras la finalización de los simulacros ruso-bielorrusos que se están llevando a cabo actualmente, y las unidades de los distritos militares del sur y del oeste ya han comenzado a cargar en los transportes y saldrán el martes 15 de febrero, informaron las agencias rusas, citando al representante oficial del Ministerio de Defensa de la Federación Rusa, el general de división Igor Konashenkov.
Durante la estancia del canciller alemán, se planteó especialmente la cuestión del reconocimiento por parte de Rusia de las dos repúblicas de Donbass de Donetsk y Lugansk. En vísperas de la visita de Scholz, la Duma Estatal rusa hizo un llamamiento al presidente Putin para que reconociera la independencia de estos territorios rebeldes. A este respecto, Scholz subrayó que el reconocimiento por parte de Rusia de las autoproclamadas DPR y LPR sería una “catástrofe política” y una violación de los acuerdos de Minsk.
El Kremlin aún no ha dado una respuesta definitiva a este llamamiento del Parlamento ruso. En una conferencia de prensa conjunta con Scholz, Putin sólo señaló que “los diputados tienen un sentimiento sutil por los votantes que simpatizan con los residentes de Donbass”.
La expansión de la OTAN no está planeada, no está en la agenda, dijo el canciller alemán Olaf Scholz.
“La expansión no está planeada, no se discute, no está en la agenda. No tendremos que tratar este tema mientras estemos cada uno en nuestro puesto”, dijo.
Scholz subrayó en una conversación con Putin que la seguridad europea es impensable sin Rusia.
Antes de llegar a Moscú, el Canciller Scholz mantuvo una reunión con el Presidente Zelensky de Ucrania. Según Scholz, el mandatario ucraniano prometió firmemente que en el marco del grupo de contacto discutiría pronto el proyecto de ley sobre el estatus del Donbass y las reformas constitucionales.
Las posibilidades de un arreglo diplomático de la situación en torno a Ucrania aún no se han agotado, dijo el canciller alemán. Moscú no se fía demasiado de las promesas de Kiev, pero el Kremlin sigue esperando avances en el marco del proceso de Minsk.
Hay tranquilidad en la frontera entre Rusia y Ucrania. Los funcionarios de Kiev tampoco ven amenazas serias, al menos eso es lo que dijo recientemente el ministro de Defensa ucraniano, Reznikov.
“El regreso del ejército ruso a sus lugares de despliegue tras las maniobras es una buena señal”, subrayó el canciller alemán Olaf Scholz.